Continuando con los temas de nutrición que he venido tratando hasta esta ocasión, y siguiendo un poco en la línea de los últimos artículos que ha escrito Mari Carmen, en este artículo te hablaré del embarazo y de sus comunes problemas intestinales.
Seguro que conoces alguna embarazada que haya tenido náuseas o vómitos.
¿Por qué las náuseas son tan típicas del embarazo?
La progesterona es la hormona encargada del relajamiento de un tipo de musculatura, llamada musculatura lisa, en la que está clasificado el útero y el sistema digestivo.
Al haber grandes cantidades de esta hormona en el embarazo, el útero se relaja para que el feto vaya cabiendo y pueda adaptarse. También provoca el relajamiento de la musculatura digestiva, esto provoca reflujo ácido, náuseas y estreñimiento, entre otros síntomas, el vaciado estomacal se ralentiza, así como el paso de los alimentos por el intestino.
¿Cuándo se dan?
Suelen tener lugar durante los primeros meses de embarazo, al haber adaptaciones hormonales al nuevo estado del cuerpo. Son más frecuentes por la mañana, y tienden a desaparecer en la segunda mitad del embarazo.
¿Cómo intentar controlar esta situación?
- Es ideal no sobrecargar las primeras comidas del día.
- Algo que por norma general sienta muy bien es consumir pocos líquidos durante las comidas, y beber más entre horas ya que así no cargas el estómago tanto mientras comes.
- Unos tipos de alimentos energéticos que se digieren mejor son los ricos en hidratos de carbono y con poca grasa.
Si estos consejos no son suficientes, te recomendaría que probases unos comprimidos naturales, y aptos evidentemente para embarazadas. Estos comprimidos se presentan en un producto llamado Naussia, de Aquilea, (enlace aquí para acceder a la ficha del producto).
En el caso de que vomites mucho, debes ayudarte con suero oral, nunca Aquarius (como ya comenté en el post sobre los vómitos y la diarrea).
¿Otros problemas intestinales típicos?
Hay otros dos que suelen presentarse de forma frecuente:
a) Acidez o esofagitis por reflujo
En estos casos los consejos a seguir son los mismos que cuando no se está embarazada. Lo que mejor sienta es fraccionar la comida (comer menos y más veces) y dejar un espacio mínimo de entre dos y tres horas antes de acostarte. Además se deben restringir, e incluso evitar, alimentos que retrasan el vaciado gástrico, es decir, que tienden a quedarse más tiempo en el estómago, como son el café, el chocolate, y las comidas grasas. También podrías valerte de un antiácido específico si fuera necesario.
b) Estreñimiento
Es típico al final del embarazo y es ocasionado, entre otros motivos, por la presión del feto sobre el intestino. Uno de los mayores problemas del estreñimiento es que propicia la aparición de hemorroides.
Para aliviar el estreñimiento, lo ideal es que tomes más alimentos ricos en fibra, que bebas más y que practiques ejercicio suave con regularidad.
Si con estas medidas no consigues solucionar tu problema de estreñimiento, te daría el siguiente consejo: además de continuar con este tipo de alimentos, incorpora a tu dieta la toma de probióticos, ya que regularán tu digestión y mejorará el estreñimento de una forma sana y natural. Esto puede evitar que tengas que recurrir a los laxantes (que sólo deben tomarse de forma muy puntual).
Si como consecuencia del estreñimiento acabas con hemorroides, mi consejo es que dejes a un lado el picante y las especias, así como la grasa de la comida, hasta que el embarazo termine o la situación mejore. Además existen cremas antihemorroidales específicas del embarazo, ¡Ten muchísimo cuidado y no uses una que no sea apta para embarazadas!
Para terminar
Espero que este post te haya sido de utilidad y que te haya servido para despejar algunas dudas. En próximas entradas seguiré desvelando más aspectos de nutrición y Mari Carmen continuará escribiendo asuntos relacionados con el embarazo y los bebés. En cualquier caso, si te han quedado dudas pendientes de resolver, tienes sugerencias o quisieras mostrarnos tus impresiones, estaré encantada de que nos escribas a través de la sección de comentarios.
¡Nos vemos en el siguiente artículo!