Sequedad bucal. Tipos, causas y tratamientos.

Como os anunciamos en el post anterior y continuando con el mes de la salud bucodental, os vamos a hablar de la sequedad bucal o xerostomía >. Esta «patología»afecta a un 20% de la población entre 18 y 30 años y a un 50% en la población mayor de 50 años. Cabe destacar que según los datos estadísticos afecta más a las mujeres que a los hombres.

Xerostomía se define como la sequedad en la boca por una disminución en la secreción de saliva, provocada por una alteración de la glándulas salivales.

La presencia de saliva en la boca es muy importante ya que mantiene los tejidos humedecidos, facilita el habla, la deglución… Además la saliva también tiene una función bacteriostática gracias a la presencia de una enzima llamada Lisozima responsable también de la digestión de algunos azúcares. Una buena secreción salival es fundamental para la salud bucodental pudiendo evitar problemas como la gingivitis, la caries, el mal aliento, etc.

Tipos de xerostomía

1. Xerostomía reversible:  en este grupo englobaremos la sequedad bucal que se puede revertir, es decir, que la podemos modular o estimular con agentes externos. Este tipo de xerostomia es producida por medicamentos, tabaco, quimioterapia…
2. Xerostomía irreversible: este apartado abarca a aquellas personas que tienen un daño irreparable en las glándulas salivales que le impiden la secreción normal de saliva. Ocurre en personas que reciben grandes dosis de radiación o radioterapia.

Causas

Es muy común que aparezca este problema en personas que hablan habitualmente en público, en personas que sufren estrés, ansiedad o depresión. También algunos medicamentos utilizados frecuentemente como los antihipertensivos, antihistaminícos, diuréticos, tratamientos oncológicos producen disminución de la secreción de saliva. Algunas enfermedades como la diabetes también causan sequedad bucal. Por la falta de ingesta de líquidos o de fruta en la dieta o un exceso de hidratos de carbono, y por supuesto la ingesta de alcohol o tabaco que impiden los impulsos nerviosos provocando una disminución de saliva en la boca. Por otra parte, la ausencia de dientes provoca un disminución en la estímulos en la boca y cómo consecuencia una menor producción de saliva.

Tratamiento

1. Primero habrá que identificar que tipo de xerostomía es la que padeces y a partir de ahí elegiremos un tipo de tratamiento u otro.
2. Si la secreción de saliva aún es recuperable (xerostomía reversible), utilizaremos sustancias que nos ayuden a producir saliva, son los llamados silagogos, o los sustitutivos de la saliva, son los agentes humectantes como son por ejemplo la Betaína, Alantoína, Xylitol o el Áloe vera.
3. El Xylitol presenta efectos beneficiosos a nivel oral: un efecto bacteriostático y humectante, a la vez que potencia el efecto anticaries y remineralizante del Fluoruro presente en los dentríficos habituales. La Betaína, la Alantoína y el Áloe vera por sus acciones antiirritantes, regeneradoras y cicatrizantes de los tejidos, previenen las fisuras de la lengua, labios y paladar, mejorando la sintomatología de los pacientes con xerostomía.
4. El tratamiento con geles humectantes, unido a una higiene bucal adecuada e incluso reforzada con cepillos de dientes de filamentos suaves y dentríficos y colutorios específicos, consigue mantener la mucosa húmeda e hidratada.

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